jueves, 19 de marzo de 2009

La Asociación de la Prensa de Almería revela que la Guardia Civil no intervino ni detuvo al agresor de un periodista

ALMERÍA.- La Asociación de Periodistas- Asociación de la Prensa de Almería (AP-APAL) rechaza enérgicamente la agresión que sufrió ayer el periodista y asociado Salvador Rodríguez Moya cuando cumplía con su trabajo en Olula del Río (Almería).

El periodista, que trabaja para la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), estaba cubriendo la información sobre la muerte de dos personas en una empresa del mármol.

"Nuestro compañero fue agredido por un familiar del empresario detenido cuando estaba a punto de iniciar una transmisión en directo. Esta persona, sin mediar palabra, y en presencia de varios agentes de la Guardia Civil, le propinó un puñetazo que le derribó al suelo. El periodista tiene un parte de lesiones y va a presentar la correspondiente denuncia.

La AP-APAL no puede aceptar que, simplemente por cumplir con su obligación, y cuando en todo momento nuestro compañero fue respetuoso y correcto, un periodista pueda ser agredido.

Rechazamos también la actitud de los agentes de la Guardia Civil que presenciaron lo sucedido porque no sólo no ayudaron al periodista, sino que ni siquiera se llevaron detenido al agresor.

Exigimos a las Fuerzas de Orden Público que, en situaciones de tensión y conflicto como las de ayer, faciliten que los profesionales de la información podamos hacer nuestro trabajo libremente y de forma segura.

Esperamos que este tipo de actuaciones no se vuelvan a producir".

También a dirección general de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA) expresó hoy a través de un comunicado su más absoluto rechazo y condena a la agresión que sufrió ayer miércoles el redactor de Canal Sur en Almería Salvador Rodríguez Moya cuando realizaba la cobertura del doble crimen de la localidad de Olula del Río.

La RTVA, según el comunicado, prestará el apoyo jurídico necesario al periodista, que ya ha presentado una denuncia por los hechos.

Salvador Rodríguez Moya recibió un fuerte puñetazo cuando se disponía a iniciar una conexión en directo desde la localidad almeriense para informar sobre un suceso en el que murieron dos personas y por el que fue detenido un empresario.

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