Luis Miguel de Dios: 'Para triunfar no hay que irse a Madrid'

VALLADOLID.- El periodista zamorano, ex director de Radio Nacional en Castilla y León y de El Mundo de Valladolid-Castilla y León, Luis Miguel de Dios recibió el Premio de Periodismo Francisco de Cossío a la Trayectoria Profesional con "orgullo, emoción y agradecimiento" y destacó, porque siempre lo ha tenido claro, que para hacer buen periodismo y triunfar en la profesión no hay que irse a Madrid.

«Por ser un periodista completo y de larga trayectoria (...) Por ser un compañero que dignifica estos oficios nuestros (...) Por haber ejercido el periodismo en momentos difíciles, con admirable dignidad». Estos y otros muchos reconocimientos que aparecen recogidos en el acta han hecho merecedores del Premio de Periodismo Francisco de Cossío a Luis Miguel de Dios. El jurado, de forma unánime, decidió conceder este galardón por su trayectoria al periodista zamorano también «como un acto de justicia a su carrera profesional».

"Nunca me quise ir a trabajar fuera de aquí", afirma el periodista, cuya trayectoria está ligada también al compromiso con el nacimiento y la consolidación democrática de Castilla y León como autonomía. "Cuando veía a Delibes y a Jiménez Lozano en la redacción de El Norte de Castilla, sabía que para triunfar no había que irse de aquí, que aquí se podía hacer un buen periodismo".

Este es también el mensaje que el periodista traslada a los jóvenes que se incorporan en este momento a las redacciones. "Se puede ser universal desde una pequeña aldea y paleto en Nueva York", asegura. Porque el buen periodismo no depende del lugar en que se realice, sino de la forma en que el periodista entiende su oficio, de su compromiso, de su curiosidad, de querer conocer la verdad o de saber lo que quiere contar, reflexiona.

Luis Miguel de Dios entendió, desde que en 1974 inicio su trabajo en El Norte de Castilla, que su "compromiso moral e intelectual" estaba ligado con Castilla y León, y desde ese momento ha ejercido su profesión en prensa, radio y televisión, una trayectoria "completa", con la que ha "dignificado" este trabajo, según ha reconocido el jurado de los premios Cossío.

"Con sorpresa, no sabía que se fallaban, con emoción y agradecimiento" ha recibido el galardón, más porque son los propios compañeros quienes han decidido esta distinción. "Emoción porque es un premio importante que viene de los compañeros", señaló; pero también "agradecimiento" porque le entiende como un "colofón" a su trabajo.

Aunque reconoce que ésta es una profesión a veces dura, también tiene reconocimientos como el que ha recibido este sábado, por unanimidad de los compañeros que han compuesto el jurado de la 24ª edición de los Premios de Periodismo Francisco de Cossío. Por ello, este galardón le "llena de orgullo y de agradecimiento".

Entrevista en 'El Norte de Castilla'

Su currículo sobrepasaría este espacio. Periodista polifacético y versátil, Luis Miguel de Dios acaba de prejubilarse como director de RNE en Castilla y León. Comenzó a rodarse en 'El Norte de Castilla", donde trabajó 10 años, y es testigo de excepción de la aventura autonómica.

-Treinta y cinco años de profesión. En tanto trayecto, ¿qué ha perdido en el camino?

-Pues creo que nada. He ganado madurez, experiencia y sigo siendo el mismo ilusionado que lleguó en 1973 a EL NORTE, pensando que quería hacer periodismo y que sigue intentando hacerlo.

-La prejubilación, ¿es un lujo o un despropósito?

-Ninguna de las dos cosas. Ésta ha sido voluntaria. Podíamos haber seguido trabajando. Tengo 54 años, pero tampoco viene mal una vida más reposada.

-Pero vuestras pensiones las tenemos que pagar todos.

-Bueno, esos son los acuerdos que hay. No me parece muy justo que te paguen por no trabajar, pero está así el sistema.

-Se va con la integración de las cajas en mantillas, la financiación sin cuadrar y sin saber si el 'Objetivo 2011' del PSOE será fagocitado por el PP. ¡Por Dios! lo deja todo abierto.

-Es que lleva así muchos años, no es culpa mía (ja, ja). Algunas veces me dicen 'No das tanta caña como antes' cuando escribo opinión. Pero es que en ocasiones cojo la bandera, miro para atrás y vienen pocos. En este caso, lo de las cajas acabará saliendo, lo de la financiación cuadrará, si no ha cuadrado ya, y lo del PSOE yo creo que va para más largo.

-¿Ha llevado su apellido como una cruz, siendo usted tan descreído, o como un escudo protector, por si acaso...?

-Lo he llevado maravillosamente bien. Siempre hago bromas con que soy hijo del Altísimo y que cuidado conmigo. Además, teniendo un padre que se llama Wenefrido, siendo de Guarrate, el apellido es lo de menos.

-¿Cómo puede resumirse la historia de la comunidad en unos versos como hizo en los Hemicisco?

-Porque me encanta escribir en verso. Se me da bastante bien el romance y considero que hay que echar algo de humor a una vida plana, condicionada y previsible como la que llevamos.

-Vivió el nacer de Castilla y León. ¿Qué era y qué es?

-Era un sueño para mucha gente cuando nació la autonomía y sigue siendo un sueño todavía para muchos. Tenemos autonomía, pero nos falta creer en nosotros mismos y no ser esa comunidad que mire tanto al pasado y que deje marchar a su gente.

-¿Ha callado más de lo que ha hablado?

-Me he callado muy pocas cosas, muy poquitas. He tratado de llevar esta profesión tan dura con la máxima dignidad, anteponiéndola a los cargos y al dinero.

-Ahora que puede, ¿el mejor presidente de Castilla y León...?

-Está por llegar.

-Con su memoria de elefante, ¿habrá memorias de la región?

-Si alguna vez las escribo, serán una especie de recreación.