El documento, entregado en la Comisión de Cultura, contiene, entre otras pruebas, 35 mensajes de texto interceptados entre Gordon Taylor, presidente de la Asociación de Futbolistas Británicos, y un asesor suyo; un contrato entre la cabecera y Glen Mulcaire, detective privado encarcelado por el escándalo de las escuchas que salpicó a la Familia Real; y un listado de 31 periodistas que habrían pinchado teléfonos de hasta 3.000 políticos, actores y famosos.
Algunos de los personajes públicos perjudicados por las acciones del diario británico están estudiando demandar a la publicación. El vice primer ministro, John Prescott; el alcalde de Londres, Boris Johnson; Elle MacPherson o Jude Law habrían sido espiados. Scotland Yard decidió no reabrir el caso después de que The Guardian publicara por primera vez informaciones sobre este asunto la semana pasada.
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