jueves, 16 de julio de 2009

Periodista independiente cubano denuncia arrestos y acoso policial

LA HABANA.- El periodista independiente Roberto de Jesús Guerra Pérez, director del disidente Centro de Información Hablemos Press (CIHPRESS), fue arrestado y golpeado junto a otro reportero el pasado 11 de julio, según denunció en un comunicado.

"El régimen de La Habana continúa reprimiendo a los periodistas independiente e impidiendo que éstos realicen su labor", dijo Guerra Pérez, quien reclamó la atención de Reporteros Sin Fronteras, el Comité para la Protección de los Periodistas y la Sociedad Interamericana de Prensa.

De acuerdo con su versión, fue detenido junto al reportero Carlos Manuel Hernández Reyes el sábado, tras asistir a un debate en el domicilio de Silvio Benítez Márquez, Presidente del Partido Liberal de la República de Cuba (PLRC), en el municipio La Lisa, en La Habana.

"Al momento de montar en el auto en que nos trasladaron a la unidad policial de La Lisa, el teléfono móvil me sonó y, cuando quise apagarlo, tres agentes del Departamento de la Seguridad del Estado (DSE) se lanzaron encima de mí para quitármelo", relató Guerra Pérez. "Me aplicaron técnicas de neutralización, provocándome lesiones en el cuello y golpes en las costillas y la cabeza", añadió.

"Eso no bastó. Dos kilómetros más adelante pararon el auto y continuaron pegándonos, nos encontrábamos esposados", dijo el periodista independiente.

"Una vez más, queda demostrado que en la Isla, desde que el gobernante Raúl Castro tomo el poder cedido por su hermano (…) la libertad de expresión, reunión y asociación continúan siendo reprimidas y no se notan cambios", señaló.

Según Guerra Pérez, las autoridades le decomisaron una cámara fotográfica, una grabadora digital, una memoria flash, un trípode, un bloc de notas, un lapicero y su teléfono móvil.

"El oficial que me ocupo todo lo descrito en la sexta unidad policial del municipio Marianao me informó que ni perdiera el tiempo en reclamar, pues yo había incumplido la ley", afirmó el periodista independiente.

"Quiero aclarar que no nos resistimos en ningún momento a la detención, ni hicimos fuerza. La violencia fue utilizada por ellos", advirtió.

Los dos reporteros fueron liberados sin cargos. "No se me dio acta de decomiso (…) Se nos amenazó con enviarnos a la cárcel (…) y me recordaron que me encuentro en espera de un juicio en el que puedo ser condenado a ocho meses de cárcel", dijo Guerra Pérez.

Asimismo, el abogado disidente René Gómez Manzano denunció el arresto temporal del médico y activista de derechos humanos Darsi Ferrer y de su esposa, Yusnaimy Jorge.

En un texto difundido por el Grupo de Trabajo de Cuba de la Sociedad Internacional de Derechos Humanos, Gómez Manzano dijo que Ferrer y Jorge fueron detenidos en su casa, en el municipio Diez de Octubre, el pasado 9 de julio.

En el operativo participaron dos autos patrulleros de la Policía en los que viajaban unos ocho agentes, según el informe.

"La pretensión de los uniformados era practicarle un registro, a lo que el médico se negó, alegando que hace más o menos un año y medio le practicaron otro supuesto registro, en el transcurso del cual le decomisaron diversos efectos de cuyo destino nunca más ha sabido", señaló Gómez Manzano.

"No me voy a dejar robar otra vez", habría dicho Ferrer a los policías, de acuerdo con el abogado disidente.

Los agentes decidieron detener al médico y a su esposa, quienes fueron conducidos a la estación de la Policía conocida como Aguilera, ubicada en la barriada de Lawton. Allí, un coronel que afirmó ser el jefe de la Policía de Diez de Octubre dio la orden de entrar por la fuerza en la casa y practicar el registro.

En el domicilio se encontraban el hijo de ocho años de la pareja y la madre de Jorge, Elsa Soca

"Los agentes arrancaron dos de las ventanas de la casa, dos bolsas de cemento y unas planchuelas metálicas", aseguró Gómez Manzano en su texto.

Según el relato, Ferrer se negó a volver a su domicilio. "Lo esposaron y unos ocho o diez agentes la emprendieron a empellones y golpes". Uno de ellos "le aplicó una llave de estrangulamiento (…) Con motivo de todo esto le ocasionaron lesiones que han sido certificadas".

Ferrer y Jorge fueron devueltos por la fuerza a su casa. "La familia se encuentra viviendo sin medida de protección alguna", después de que la policía rompiera la puerta y dos ventanas, dijo Gómez Manzano.

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