"Este asesinato mostró que el trabajo en Chechenia es mortalmente peligroso y no podemos arriesgar la vida de nuestros colegas aunque estén dispuestos a continuar su trabajo", declaró Cherkasov. "Suspendemos las actividades de nuestra oficina en Chechenia", añadió, sin precisar por cuánto tiempo.
Natalia Estemirova fue secuestrada el miércoles en Grozny, la capital chechena, y horas después su cadáver fue encontrado con dos disparos en la cabeza y en el pecho en la vecina Ingusetia.
Ese asesinato suscitó una oleada de indignación en Occidente, donde se recuerda muy bien otro asesinato, en octubre de 2006, de la periodista Anna Politkovskaia, que denunciaba los abusos de los derechos humanos en Chechenia y que trabajó con Estemirova.
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