Venezuela dice que el foro de SIP es parte de una campaña contra Gobiernos progresistas

CARACAS.- La ministra venezolana de Comunicación, Blanca Eeckout, dijo que el foro que la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) celebró este fin de semana en Caracas forma parte de la campaña "del imperio" contra los Gobiernos progresistas de la región.

La unidad pueblo-gobierno que existe, por ejemplo, dijo Eeckout, en Argentina, Ecuador y Venezuela, donde se ha cambiado o se busca cambiar leyes que rigen al periodismo que permiten "el terrorismo mediático", evidencia que "se puede tener Gobiernos absolutamente identificados con sus pueblos".

"Por eso está la SIP aquí: tratando de que esta idea no se propague", subrayó la funcionaria del Gobierno del presidente Hugo Chávez en el I Encuentro Latinoamericano de Contrainformación y Comunicación Popular, convocado para hacer frente a la cita de la organización continental de los dueños y directores de medios.

La SIP es una instancia "mafiosa" que, además, subrayó la ministra venezolana, "no tiene nada que ver con el momento histórico y sus campañas, mentiras y permanente amenaza, ya no amenazan a nuestros pueblos".

La historia de la SIP, insistió, ha sido en el pasado la de "cumplir su papel de dictadura mediática junto a las dictaduras sanguinarias" como las vividas "con (Fulgencio) Batista en Cuba, (Augusto) Pinochet en Chile y (Alfredo) Stroessner en Paraguay".

En la actualidad, agregó, la SIP combate el cambio de normas por Gobiernos decididos a acabar con el "terrorismo mediático" y darle mayor poder a sus pueblos, y por ello "está de lado" del Gobierno de facto de Honduras de Roberto Micheletti.

El "Gorileti", dijo empleando el calificativo que acostumbra a usar Chávez al nombrar al gobernante de facto de Honduras, "debe ser un buen asociado a la SIP", instancia cuyas "mentiras jamás detendrán la lucha que han emprendido nuestros pueblos".

"Los sectores más fascistas, reaccionarios y dictatoriales" de Honduras derrocaron a Manuel Zelaya, porque este pretendió cambiar leyes en beneficio popular, al igual que hacen y buscan hacerlo otros Gobiernos progresistas, repitió Eeckout.

Organizaciones como la SIP, entonces, sostuvo, "se niegan a que las leyes se transformen".

Sobre la reunión de la SIP, dijo que su desarrollo en Caracas evidencia que "Venezuela es un país profunda, absoluta y totalmente democrático, una democracia a prueba y de las más sólidas del mundo, que tiene como principio el derecho a que todos nos expresarnos".

"Lo que no podemos permitir -remató- es que las oligarquías crean que los derechos son sus privilegios" y en Venezuela ya se ha legislado para garantizar que "un derecho de todos no se convierta en privilegio de un grupo para hacer terrorismo".