Según el ministro de Comunicación y portavoz del Ejecutivo, Jalid Naciri, "todos los Estados tienen un sistema jurídico y el nuestro no permite caricaturas del rey o de la familia real. Es un hecho que se puede aceptar o no, pero si no se hace no es nuestro problema".
En ese número, que debía llegar entre ayer y hoy a los kioscos del país, se incluía una viñeta que el dibujante Plantu publicó en el periódico francés "Le Monde", así como otra del marroquí Jalid Gueddar, autor de una caricatura del príncipe Mulay Ismail, primo de Mohamed VI, en el diario "Akhbar Al Youm".
En la primera, donde podía leerse "Juicio en Marruecos contra el caricaturista Jalid Gueddar, que ha osado dibujar a la familia real marroquí", una mano que surge de la estrella de cinco puntas de la bandera marroquí trazaba un personaje coronado, que sacaba la lengua y tenía la nariz roja como la de un payaso.
La publicación en las ediciones de los pasados jueves, viernes y sábado de esa caricatura, de la de Gueddar y de otra en la que aparecía Mohamed VI, censurando a Gueddar, junto al presidente de Túnez, Ben Alí, expulsando de su país a la periodista de "Le Monde" Florence Beaugé, le valió al diario galo la no distribución de esos tres números.
"No tenemos ningún problema con ningún periódico español, pero no permitiremos a "El País", como tampoco se le permitió a "Le Monde", que atente contra la institución monárquica marroquí", afirmó hoy Naciri.
A su juicio, las caricaturas sobre la libertad de expresión en Marruecos o la familia real dan muestra de "un comportamiento irresponsable porque censuran todos los trabajos de democratización y el respeto de las libertades en el país, ocultos por esos periódicos por razones que ignoramos".
"El papel de la prensa no es el de la provocación. No se está obligado a estar enamorado del país, pero sí a respetarlo", apuntó el portavoz gubernamental.
"Esperamos que los medios sean objetivos con Marruecos, que lo traten con el respeto que se merece, como un país que construye su libertad y con muchas libertades de expresión, pero en los que como todos, hay reglas deontológicas y jurídicas", añadió.
El juicio contra Gueddar y contra el director de su diario, Tuafic Buachrin, se inició a principios de mes en el Tribunal de Primera Instancia de Casablanca y tiene prevista para hoy una nueva sesión.
Hoy mismo se condenó además a un año de prisión exento de cumplimiento al director del diario marroquí "Al Jarida Al Oula", Ali Anouzla, por "publicación malintencionada de una falsa información, alegaciones y mentiras", en un artículo sobre la salud del rey, del que en agosto la Casa Real informó de que había padecido una severa gastroenteritis.
La noticia fue recogida con profusión, y en ciertos casos alarmismo, en las portadas de los periódicos marroquíes, y por ese mismo caso, el director del diario "Al Michaâl", Idris Chahtane, fue condenado el pasado 15 de octubre a un año de prisión firme.
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