LA HABANA.- La Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) fustigó este fin de semana la campaña mediática desatada contra la isla por considerarla enfilada a dañar la imagen de la Revolución y facilitar el viejo sueño de poner de rodillas a su pueblo.La declaración, titulada Pensamiento colonial y estrategia imperialista, señala que en las últimas semanas los enemigos de las ideas y la obra de Cuba la han estado atacando en los medios de prensa con una furia inusual.
En esta nueva ofensiva, sobre todo en Europa, se ha hecho un enorme despliegue en la prensa escrita y los medios electrónicos, controlados por gigantescas empresas periodísticas pertenecientes a su vez al poder económico, fundamenta el texto.
Recuerda que en medio de la histeria de la derecha, el Parlamento Europeo adoptó un acuerdo de condena a Cuba que ha indignado al pueblo por la intromisión grosera en los asuntos internos del país.
Sostiene la nota que alguien medianamente informado sobre cómo operan los medios, la política y los intereses hegemónicos en el mundo, no puede pensar que la causa del escándalo es la muerte voluntaria de un recluso común.
Afirma que en estos tiempos no son raros, por ejemplo, los muertos en cárceles europeas, las huelgas de hambre como la de los maestros peruanos en reclamo de trabajo, o la cifra preocupante de suicidios de médicos en México.
"¿Será que los cubanos han invadido a otro país, utilizado aviones sin piloto y asesinado impunemente a la población civil? ¿Habrán quitado dinero a los pobres para salvar a unos pocos banqueros? ¿Decidió el Gobierno cubano matar a haitianos en lugar de curarlos, lanzar gases para disciplinar a desempleados o reprimir a inmigrantes?", pregunta la UPEC.
"¿En algún lugar habrá instalado bases militares con el pretexto de alfabetizar o extirpar las cataratas? ¿Estará la pequeña isla haciendo sufrir a otro pueblo con un bloqueo inmisericorde? ¿Robó atletas a otras naciones? ¿Dinamitó en el aire algún avión con pasajeros?", inquiere.
Esas y muchas otras preguntas se hace toda persona honrada ante esa avalancha cargada de cinismo, mentira y tergiversación, en la que el país víctima es presentado como victimario, plantea.
En esta nueva ofensiva anticubana -señala- no faltan las groseras manipulaciones sobre la prensa, los periodistas y los estudiantes de esa carrera.
"Nunca hemos rendido cuenta de nuestro trabajo a quienes en realidad no les interesa ni el periodismo ni la vida de los periodistas actuales o futuros, sino la de aquellos que se disfrazan de tales y cobran como mercenarios".
El pueblo cubano conoce sus aciertos y limitaciones, sabe de nuestros esfuerzos para hacerlos mejores, del daño del bloqueo que impide los recursos para dotarlos de equipamiento moderno y de una pujante industria de contenidos, sostiene la organización.
Sufre también los efectos de una política de hostilidad permanente en el terreno de la propaganda subversiva y la agresión radial y televisiva.
La opinión pública del mundo y en especial la europea tienen derecho a conocer la verdad de Cuba, a exigir que no la engañen y que se respete la decisión de los cubanos de vivir con justicia y dignidad, reclaman los periodistas cubanos.
Insistir en la mentira sólo hará repetir los descalabros de una política que no tiene la más mínima posibilidad de éxito en nuestro país, pues está basada en la imposición, la prepotencia y el chantaje, advierten.
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