Álvaro, Aberaturi y Guasch, entre otros compañeros, salieron de RTVE con motivo del último ERE.
"No nos apuntamos de manera voluntario, nos obligaron a irnos, fue un despido en toda regla", mantienen. El todavía ente público no podía hacer frente a los pagos de todas las indemnizaciones de una vez, por eso se estableció que aquellos que tenían 52 años recibirían el pago fraccionado de esa indemnización a modo de renta mensual hasta la jubilación. Y aquí es donde viene el enfrentamiento, porque han dejado de percibir esta indemnización o la han visto reducida.
¿El motivo? El artículo 4.7 del denominado "Texto articulado del plan de empleo de RTVE. Bajo el epígrafe 'Incompatibilidades', se detalla que "los trabajadores acogidos a este medida -el ERE-, mientras perciban la renta irregular diferida con cargo a la empresa, no podrán prestar servicios, por cuenta propio o ajena, por sí mismo o a través de persona física o jurídica interpuesta, para la corporación RTVE o sus empresas filiales o participadas, así como para empresas que estén en competencia directa con las actividades de la corporación. si algún trabajador prestase servicios en alguna de estas últimas empresas, durante el periodo de su prestación no percibirán el importe correspondiente a la renta irregular diferida".
"La interrupción del pago no está justificada. Ninguno ha realizado actos inconcurrentes", explica Fernando Pérez Espinosa, experto en derecho laboral. "Hemos enviado cartas a Alberto Oliart, presidente de RTVE, explicándole que no se ha incumplido nada, pero no hemos obtenido respuesta alguna".
No se trata de una demanda colectiva, sino de demandas individuales, ya que se reclama la devolución del dinero. Álvaro y Aberasturi consideran que han cumplido la ley. "El Estatuto de los trabajadores, que tiene rango superior, limita a un máximo de dos años el tiempo en el que no se pueden desarrollar actividades en competencia después de abandonar una empresa, y es lo que entendimos que se recogía en el ERE", argumenta Aberasturi. "Nosotros, desde el 1 de enero de 2007 al 1 de enero de 2009 hemos estado en el INEM".
Álvaro recibió una carta en octubre de 2009 advirtiéndole de que había colaborado con otros medios y que no se le pagaría más ninguna cuota de la indemnización y que, además, debía devolver lo percibido entre enero y octubre. Álvaro mandó un escrito explicando que no había realizado los trabajos que se le atribuían. Aberasturi, por su parte, recibe todos los meses una carta o un burofax en el que se le recuerda que está incumpliendo la normativa y se le comunica la cantidad de dinero que se le descuenta por haber colaborado en tertulias de televisión.
Dentro de RTVE hay una comisión de seguimiento encargada de 'chequear' la presencia de estos profesionales en los medios. "Se creen con derechos sobre nosotros. Además, es una interpretación posterior la que han hecho del artículo 4.7", afirma Aberasturi.
"TVE esta intentando apartar la presencia de voces y pensamientos libres. En el momento en el que no hay compensación económica, han pasado los dos años o no se acredita concurrencia, como ha ocurrido, no es válido ese artículo", añade espinosa.
Desde RTVE eluden realizar cualquier comentario ya que consideran que esta demanda no es contra ellos sino contra el ente público.
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