viernes, 25 de junio de 2010

Rafael Martínez, autor de Estratega.com, da algunos consejos sobre cómo bloguear

MADRID.- Rafael Martínez es el autor de Estratega.com, un blog de referencia en el que empresas e individuos tienen un lugar donde aprender ciertos consejos para encarar negocios o propuestas de futuro. Y todo ello con mucho humor. Finalista de los premios Bitacoras 2009, este blog cuenta con presencia dentro del universo bloguero de la revista digital FronteraD. Lo entrevista 'Abc', de Madrid.

¿Cuándo nació Estratega?
En septiembre de 2004

¿Cuáles son sus principales focos de interés?
La estrategia y la visión a largo plazo, tanto en empresas como en la sociedad, con un punto de humor. Sólo a veces me convierto en martillo de gurús y azote de determinadas especies endémicas del hábitat empresarial.

¿Cuál es la principal ventaja que destacarías del formato blog?
El lector puede lograr una sorprendente cercanía con el autor. Si sigue a varios, la lectura es mucho más eficiente gracias a los agregadores de entradas. En el otro lado, la escritura se beneficia de lo fácil que es publicar en un blog, y de la disciplina que impone actualizarlo. Para mí es también importante la posibilidad de recabar comentarios. Pero debo confesar que “Noé y la innovación en equipo”, la entrada de mi blog que tiene más comentarios (casi 500), no los consiguió en el blog estratega.com sino cuando se publicó en Baquía.com…

El mundo de los blogs ha cambiado mucho en los últimos años, ¿en qué o dónde percibes el mayor cambio?
Existía un romanticismo amateur, una cierta bohemia pionera. Napoleón decía que los individuos se movían por tres únicas razones: por honor, por amor o por dinero. Pues bien, aunque siguen siendo muchísimos los blogs basados en lo personal, lo cívico o las aficiones, entre los más populares hay un sesgo mayor hacia la profesionalidad y la búsqueda de visitas. Es curioso que este proceso converge con una prensa tradicional que cada vez es más “bloguera” y ofrece más grados de libertad a sus colaboradores. En este sentido, hay blogs que han alcanzado un “punto dulce” muy interesante.

El blog ahora tiene que compartir protagonismo con otras herramientas de comunicación como son las redes sociales, ¿influyen éstas en la forma de bloguear?
No estoy seguro, pero tengo la sensación de que influyen más en cómo se leen los blogs que en cómo se escriben. Ahora el uso de Internet es más fugaz, multitarea y móvil. Puede que el éxito de las redes sociales en España tenga que ver con las tapas y nuestra capacidad de hablar todos a la vez.

¿Qué aportan estas plataformas a la conversación? ¿Las utilizas para difundir los contenidos del blog?
Sí. Suelo anunciar en Twitter las nuevas entradas, y me divierte ver su difusión. Las nuevas plataformas son más ligeras y versátiles, lo que hace a la conversación casi continua gracias a la conectividad móvil.

¿Qué consejos le darías a alguien que acaba de llegar a la blogosfera?
Los blogs ya no son una novedad. Hay muchas recopilaciones de consejos muy interesantes y hasta cierta "etiqueta". Al iniciar un blog, merece la pena repasar lo que otros aconsejan desde su experiencia, aunque sugiero hacerlo con un criterio propio.

Por ejemplo, en estratega.com nunca he seguido los consejos sobre frecuencia de publicación, longitud y estilo del texto o presentación del autor, llegando incluso a la herejía de sacar el blog de las búsquedas de Google. De igual modo, conviene reflexionar sobre los propios objetivos y valorar qué aportaría de nuevo o atractivo a «la oferta» el propio blog (decía Ortega y Gasset que el esfuerzo inútil genera melancolía, y la atención del internauta está ya muy disputada).

Tampoco conviene dejar de considerar las muchas variantes de publicación que ofrece ahora la red: redes sociales, Twitter, podcasts, blogs colaborativos, fotologs, agregadores de noticias, comentarios, opiniones sobre productos, foros...

Por otro lado, si es una empresa la que pretende utilizar los medios sociales para una estrategia de comunicación, un asesoramiento previo ayudará a reducir riesgos y multiplicar impactos. Afortunadamente, España cuenta con especialistas y empresas muy profesionales y con gran talento.

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