sábado, 7 de abril de 2012

La CPJ denuncia el asalto violento contra una periodista rusa

NUEVA YORK.- El Comité de Protección de Periodistas (CPJ) denunció el asalto violento a la periodista rusa Elena Milashina, ocurrido el jueves en un suburbio de Moscú.

Reportera del diario Independiente, Milashina participó como ponente en el taller Mundos distintos, amenazas similares, organizado por el Instituto de las Américas, Artículo 19 y la Asociación Mundial de Periódicos y Editores (WANIFRA, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con la información recibida por CPJ, Milashina y su acompañante, Ella Asoyan, integrante de la organización internacional Freedom House, fueron abordadas por dos hombres cuando se dirigían a la casa de la periodista, ubicada en un suburbio de Moscú.
Los primeros reportes indican que los hombres golpearon a Milashina durante varios minutos, hasta que intervinieron transeúntes que acudieron al auxilio de las mujeres. Antes de huir, los hombres robaron a Milashina su bolso y a Asoyan su computadora personal.
Pese a que de inmediato se dio parte a la policía, las autoridades no acudieron al lugar de los hechos, por lo que Milashina tuvo que retirarse del sitio para ser atendida. El parte médico indica que la periodista tiene golpes contusos en el cuerpo, además de que sus agresores le rompieron los dientes.
El pasado lunes 2, Milashina reportó su regreso a Moscú a colegas que estuvieron con ella en el taller Mundos distintos, amenazas similares.
A dicho taller, realizado del 26 al 29 de marzo en instalaciones del Instituto en La Jolla, California, acudieron 25 periodistas de 14 países. Algunos de ellos, como Milashina, ofrecieron testimonios sobre las agresiones sufridas por el ejercicio periodístico.
En su ponencia, la periodista informó que entre 2006 y 2011, siete periodistas rusos han sido asesinados, seis de ellos de Novaya Gazeta. El caso más significativo fue el ocurrido en octubre de 2006 contra la periodista Ana Politkovskaya, mentora de Milshina en Novaya Gazeta, y quien se distinguió por ser una dura crítica de la política de Vladimir Putin en Chechenia.
CPJ destacó en una alerta que Milashina continuó con el trabajo de Politkovskaya en Chechenia y en la región norte del Cáucaso. Entre las investigaciones más relevantes de Milashina está el hundimiento de un submarino ruso con 125 tripulantes de la marina, en el mar de Barents, entre Noruega y Rusia, en el año 2000, y la masacre de 370 personas –entre ellas 171 niños– a manos del ejército ruso en una escuela en Beslán, Osetia del Norte, que había sido tomada por terroristas chechenos.
La coordinadora de CPJ, Nina Ognianova, exigió a las autoridades rusas esclarecer el ataque a Milashina y dilucidar si el asalto está vinculado con su trabajo periodístico, relacionado con “temas sensibles, incluyendo violaciones a derechos humanos en el norte de Cáucaso y las muertes de colegas de Novaya Gazeta”.
En un comunicado, Ognianova lamentó que “la policía no haya respondido al llamado de auxilio de la periodista”, por lo que exigió al gobierno ruso “investigar el retraso de la policía y su responsabilidad en no haber tomado las medidas adecuadas”.
De acuerdo con CPJ, Milashina ha colaborado con esa organización internacional con investigaciones sobre la ausencia de indagatorias en el ataque al periodista Oleg Kashin, del Kommersant, y el asesinato de su maestra Ana Politkovskaya.
Por el activismo de la periodista, CPJ consideró que “por lo brutal del ataque a Milashina es probable que no haya sido un simple robo. Hemos llamado a las autoridades para que hagan lo que tengan a su alcance para llevar a los responsables a la justicia”.

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