MADRID.- La capilla ardiente del periodista Manuel Leguineche,
que falleció a los 72 años, ha sido instalada en el tanatorio San
Isidro, de Madrid y ha abierto sus puertas a las 18.30 horas de ayer para recibir
a sus familiares, amigos y compañeros.
Allí, la presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM),
Carmen del Riego, ha dicho de "Manu" Leguineche que era un referente
tanto para los periodistas como para los ciudadanos que vieron en sus
crónicas, libros y reportajes una realidad que no conocían; "toda una
generación de periodistas quería ser Manu Leguineche", ha añadido.
El también periodista Vicente Romero ha recordado a las puertas de la
capilla ardiente el humor del periodista, nacido en Arrazua (Vizcaya),
hasta en los momentos más difíciles como la guerra de Vietnam y ha
destacado que "nunca nadie hablaba mal" de Leguineche a pesar de que "el
periodismo es un mundo de envidias".
Por su parte Miguel Ángel Aguilar, periodista de El País, ha
calificado a Manuel Leguineche como una persona muy especial y un
periodista vocacional que "ayudó mucho a la gente joven" y siempre fue
"riguroso" en sus informaciones.
Alfonso Bauluz, periodista de la Agencia Efe, describió a su
compañero, a su entrada en el tanatorio, como "un hombre entrañable, un
maestro y un excelente reportero" que "siempre se apartó de los cargos" y
se acercó "a los hechos, a la calle y a las guerras".
Asimismo, Ramón Lobo, antiguo enviado especial de El País, ha
recordado el ejemplo de "gente como Manu, que nos muestra el camino del
periodismo paciente" e independiente y de quien ha dicho que es "el
padre de todos nosotros".
La capilla ardiente estará abierta hasta las 17.30 horas de hoy
cuando se oficiará una misa, según informó la Asociación de la Prensa de
Madrid.
No hay comentarios:
Publicar un comentario