BUENOS AIRES.- Un polémico proyecto de la presidenta argentina, Cristina Kirchner, para declarar de "interés público" el papel de prensa, agudizó la división entre el Gobierno y la oposición y los grandes diarios que consideran que la iniciativa busca limitar la libertad de prensa.
El Gobierno defendió el sábado el proyecto presentado en el Congreso que apunta a un "abastecimiento igualitario" a todos los medios de papel de periódico, que sólo produce una fábrica en Argentina, controlada por los influyentes diarios Clarín y La Nación, abiertamente enfrentados con Kirchner.
El jefe del bloque de diputados del gobernante peronismo, Agustín Rossi, dijo el sábado que la iniciativa presentada la noche del viernes en el Congreso "garantizará la transparencia del mercado" y generará "condiciones igualitarias para todos" los diarios.
Kirchner anunció la iniciativa como parte de un informe basado en una investigación de 26.000 páginas en la que además acusó a los diarios Clarín y La Nación, los de mayor difusión de Argentina, de apropiarse en 1976 de Papel Prensa, la única productora del insumo, en complicidad con la dictadura (1976-83), aunque ambos medios negaron enfáticamente esa versión.
La diputada opositora Silvina Guidici, titular de la Comisión de Libertad de Expresión de la Cámara, sostuvo el sábado que la intención del Gobierno es "quedarse con la distribución del papel para hacer lo mismo que hacen con la publicidad oficial: asignársela enteramente a sus amigos".
En similar sintonía, la también legisladora opositora, Elisa Carrió, estimó que el objetivo oficial es "cambiar los intereses del grupo Clarín por el monopolio de Kirchner".
Según Carrió, el Gobierno "va por la detención" de los directivos del Grupo Clarin y La Nación y "no por la expropiación (de Papel Prensa), porque esa es una declaración del Congreso y (en ese ámbito) no sale", en alusión a que el gobernante peronismo perdió la mayoría en las dos Cámaras tras las legislativas del 28 de junio de 2009.
Otros legisladores de la oposición consideran que el objetivo final del Gobierno es expropiar la empresa creada en 1972 y en la que el Estado posse el 27,46% de las acciones, mientras Clarín concentra el 49% y La Nación el 22%.
El texto enviado al Parlamento declara de "interés público" la producción, distribución y comercialización del estratégico insumo y a la vez impulsa la creación de una comisión bicameral que elaborará un nuevo marco regulatorio para el sector.
"Los estudios realizados determinan que (Papel Prensa) ha vendido a sus asociados (Clarín y La Nación) por debajo del costo de producción", señala el texto oficial.
Añadió que Papel Prensa, con una capacidad de producción de unas 170.000 toneladas anuales, "sólo vende el papel remanente después de abastecer completamente a todos los medios de los dos grupos, manteniendo la pastera por debajo de su capacidad de producción".
"Kirchner retieró sus amenazas contra la prensa", tituló el sábado en su portada el diario Clarín, la firma emblema del grupo homónimo formado por decenas de empresas, que mantiene una fuerte pelea con el Gobierno.
Una semana antes de que la mandataria difundiera el martes el informe sobre Papel Prensa, el Gobierno canceló por presuntas irregularidades la licencia de la firma Fibertel, también del grupo Clarín, que brindaba servicios de internet a un millón de usuarios, sobre un total de 4,2 millones en el país.
En 2009, el Gobierno le quitó al Grupo Clarín la licencia exclusiva de transmisión pagada de partidos del fútbol argentino y se la transfirió a la televisión pública.
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