miércoles, 29 de abril de 2020

Muere el exfutbolista y periodista inglés Michael Robinson a los 61 años


MARBELLA/LIVERPOOL.- El exfutbolista inglés Michael Robinson, una de las voces más reconocibles de la información deportiva en España, murió el martes a los 61 años en su domicilio de Marbella después de una larga lucha contra el cáncer. 

“Con tremenda tristeza os comunicamos el fallecimiento de Michael. Nos deja un gran vacío, pero también innumerables recuerdos, llenos del mismo amor que le habéis demostrado”, dijo su familia en la cuenta de Robinson en Twitter.
“Os estaremos eternamente agradecidos por haber hecho a este hombre tan felíz, nunca caminó solo. Gracias”, añadía en alusión a la letra del emocionante himno del Liverpool, el club inglés con el que Robinson fue campeón de Europa en 1984.
Personaje carismático y muy querido en España, inconfundible por su genuino acento británico y sus expresiones castizas, revolucionó la forma de analizar el fútbol en televisión, primero en Canal+ con su inseparable compañero de micrófono Carlos Martínez y después encabezando otros programas de radio y televisión como Acento Robinson o Informe Robinson.
Con tan solo 17 años empezó su carrera en el club inglés del Preston North End. Más tarde jugaría en clubes de la liga inglesa como el Manchester City o el Brighton, y finalmente con el Liverpool, con el que ganó la Premier, la Copa de la Liga y la Copa de Europa. Vino a España a jugar con el Osasuna en enero de 1987, pero los problemas con su rodilla lo obligaron a retirarse dos años más tarde.
“El Liverpool FC está profundamente entristecido por el fallecimiento del exjugador Michael Robinson, de 61 años”, dijo el club en un comunicado.
“Estamos consternados por el fallecimiento de Michael Robinson. Su legado siempre permanecerá entre nosotros.”, dijo por su parte el Osasuna en Twitter.
A finales de 2018, Robinson agradeció las muestras de cariño recibidas tras anunciar que padecía un cáncer de piel.
“Si por un momento me faltara ánimo ya me habéis reforzado. Estoy muy agradecido y sintiendo como si estuviera en Anfield cuando cantaban ‘You’ll never walk alone’”, dijo en un tuit.
Las reacciones a su muerte en las redes sociales eran numerosas.
“Nos acompañó en miles de tardes de fútbol y nos contó historias increíbles, nos mostró la vida más allá del deporte. Gracias, Michael Robinson. Te echaremos de menos”, escribía el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su cuenta oficial de Twitter.
“Nos levantamos con la triste noticia del fallecimiento de uno de los nuestros. Fuiste quien nos alegró siempre el deporte. Te estamos agradecidos”, decía el tenista Rafa Nadal en la misma red social.

viernes, 24 de abril de 2020

La Unió de Periodistes propone a la Generalitat valenciana un plan de ayudas al sector vinculado al mantenimiento del empleo

VALENCIA.- La Unió de Periodistes Valencians ha remitido a la Generalitat, tras mantener conversaciones con la Secretaría Autonómica de Comunicación, una propuesta para desarrollar un plan de ayudas públicas para el sector periodístico de la Comunitat. El objetivo es "diseñar una estrategia de reconstrucción económica de la profesión", afirma la entidad en un comunicado.

Desde la Unió de Periodistes destacan que, durante esta pandemia de coronavirus, "el periodismo se ha considerado una actividad esencial y ha quedado demostrada su importancia para garantizar el derecho a la información de toda la ciudadanía". "Aun así, la caída de la publicidad ha provocado una disminución de parte importante de los ingresos de los medios en un momento en que su situación tampoco era demasiado esperanzadora", explican.
Ante esta situación "de urgencia", la asociación defiende la necesidad de un plan específico de ayudas públicas para el sector periodístico, para preservar la pluralidad informativa y la lucha contra la desinformación que están encabezando los medios de comunicación.
"Esto se tiene que hacer con periodistas, porque sin periodistas no hay periodismo, por lo tanto las ayudas públicas tendrán que vincularse, a la fuerza, al mantenimiento de los puestos de trabajo", remarcan.
En este sentido, la propuesta de la Unió de Periodistes Valencians contempla, a corto plazo, un aumento de la publicidad institucional que favorezca la información práctica sobre la lucha contra la pandemia y, a medio y largo plazo, un plan de choque que incluya: ayudas económicas estructurales para los medios de comunicación; ayudas, a través de Labora, para la contratación de periodistas y fotoperiodistas en las empresas de comunicación; ayudas a la contratación de periodistas en medios locales y ediciones comarcales de medios valencianos o de periodistas para ediciones valencianas de medios de fuera del ámbito territorial valenciano.
Asimismo, aboga por 'créditos blandos' para la creación de nuevos proyectos periodísticos; contratación de periodistas y fotoperiodistas en las administraciones públicas para reforzar los gabinetes de prensa; inversión en suscripciones digitales a diarios por parte de las administraciones públicas; desgravación fiscal para las empresas que hagan inversión publicitaria en los medios; plan de fomento de lectura de prensa y la defensa del IVA reducido del 4% para las publicaciones digitales.

jueves, 23 de abril de 2020

El coronavirus, otro golpe para la prensa británica


LONDRES.- Los medios británicos, debilitados por la pandemia de coronavirus, temen una nueva hecatombe entre las numerosas cabeceras de prensa escrita local y algunos llegaron a pedir al gobierno que aumente los impuestos a los gigantes digitales para financiar un respaldo público.

Ante la proliferación de noticias falsas que circulan en las redes sociales desde el comienzo de la crisis sanitaria, grandes medios como la BBC han registrado un importante aumento de lectores en busca de información fiable.
Pero esto es solo "un débil rayo de esperanza en una horrible nube negra", afirma Ian Murray, director de la sociedad británica de redactores jefes.
La realidad es muy diferente para la mayoría de medios: la crisis amenaza con hundir a muchos de ellos, que han estado en mal estado durante años, especialmente entre la abundante prensa local británica.
Entre 2005 y 2018, echaron el cierre 250 publicaciones locales. Y desde el comienzo de la pandemia, más de 2.000 personas, principalmente personal no editorial, han sido despedidas de 500 cabeceras diferentes, según Press Gazett, revista especializada en este sector.
La causa es el desplome de las ventas en papel debido al confinamiento y la caída del mercado publicitario.
Según la empresa de investigación sobre medios Enders Analysis, las tiradas podrían reducirse a la mitad este año y los ingresos por publicidad podrían bajar en casi un tercio, es decir unos 330 millones de libras (408 millones de dólares, 372 millones de euros).
Algunas empresas prevén pérdidas de ingresos de millones de libras y ya han reducido los salarios, lo que a veces requiere que el personal trabaje menos horas o tome unas vacaciones no remuneradas.
Otros han anunciado fusiones o advertido que podrían cerrar completamente.
Según analistas del sector, hasta 5.000 puestos de trabajo están en peligro.
El ministro de Cultura, Olivier Dowden, estimó las pérdidas del sector mediático en 50 millones de libras durante la pandemia, sobre todo porque algunas publicaciones han abierto en acceso libre en internet todo su contenido sobre el covid-19.
Pero, según el exeditor del Daily Mirror Roy Greenslade, la crisis no terminará con el fin del confinamiento.
El período pospandemia "probablemente marque la fase terminal del largo declive del periódico en papel", predice Greenslade, ahora columnista de medios de comunicación del diario The Guardian.
Sin la ayuda "inmediata" del gobierno, muchas publicaciones se verán obligados a cerrar, dice por su parte James Mitchinson, redactor jefe del Yorshire Post, un periódico local del norte de Inglaterra.
"Las medidas que hemos tomado para reducir los costos no compensan la reducción de nuestros ingresos por publicidad", afirmó recientemente en el Sunday Times.
En opinión de Mitchinson, la prensa necesita "subvenciones" públicas y un cambio en las reglas del sistema de compensación establecido por el gobierno británico desde el comienzo de la pandemia de covid-19.
El objetivo sería permitir que "trabajadores claves" como los periodistas "trabajen, no tengan que deponer las armas" cuando sus redacciones ya no puedan pagarles.
Para recaudar los fondos necesarios para apoyar a los medios a largo plazo, el Sindicato Nacional de Periodistas (NUJ) ha pedido al gobierno de Boris Johnson que aumente el nuevo impuesto a los gigantes digitales, que entró en vigor el 1 de abril.
Este impuesto del 2% debería eventualmente traer "500 millones de libras al año", afirma el secretario general adjunto del NUJ, Seamus Dooley.
Según Dooley, "triplicar" este porcentaje permitiría hacer "una considerable inyección inmediata" en un sector que ve sus ingresos publicitarios regularmente fagocitados por los gigantes digitales.
"No hacer nada no es una opción", lanza Dooley, que ve la pandemia como una oportunidad para actuar antes de que partes del Reino Unido se vean privadas de una prensa regional, que se encarga, entre otras cosas, de vigilar a las autoridades locales.
"Irónicamente, el periodismo nunca ha estado en una posición tan complicada, pese a que nunca ha sido tan importante como ahora", añade.

miércoles, 22 de abril de 2020

Muere por coronavirus el indiscutible periodista José María Calleja


MADRID.- Después de dos semanas ingresado en la UCI del Hospital Clínico de Madrid, el indiscutible periodista y escritor José María Calleja ha muerto por coronavirus. Tenía 64 años (Ponferrada, León, 1955) y era conocido por su trabajo en la época final y más ardua de ETA, una labor por la que llegó a estar «en la diana» de los terroristas. Había ingresado en ese hospital el 29 de marzo. Tras agravarse su salud, fue trasladado a la UCI, donde murió este martes martes.


Era doctor en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid, profesor asociado de Periodismo en la Universidad Carlos III de Madrid y Licenciado en Historia por la Universidad de Valladolid. Su carrera en el mundo del periodismo comenzó en País Vasco a principios de los 80 en la delegación de la Agencia EFE en esa comunidad.
Su última publicación fue «Lo bueno de España», un antídoto contra el independentismo que reivindica la Transición, el matrimonio homosexual, el deporte o el fin ETA como motivos del «orgullo razonable» de ser español.
Escribió una docena de libros y entre sus galardones destaca el Premio Espasa de Ensayo de 2001 con «Arriba Euskadi: la vida diaria en el País Vasco». También destaca su faceta de presentador y director con el programa «El Debate de CNN+» y colaboró en televisión en Antena 3 o Cuatro, en la radio (Onda Cero y Cadena SER) y en la Agencia Colpisa, entre otros.
Su muerte hoy ha sobrecogido a infinidad de conocidos que lo recuerdan como a un hombre honesto, con un gran compromiso cívico y una gran valentía.
Calleja fue un joven comunista del PCE cuya militancia antifranquista lo llevó a la cárcel. Fue entre 1973 y 1974, con sólo 18 años.


Hace dos meses Abc le entrevistó y reconoció que a la izquierda «le ha costado hacer un proceso de asimilación de la idea de España» debido a la apropiación que de ella hizo el anterior régimen.
«Yo estuve en la cárcel en la dictadura y Franco nos decía a los de la oposición que no éramos españoles. Luego, en la época del terrorismo en el País Vasco, los que nos querían asesinar a mí me llamaban españolazo. Yo siempre me he sentido español...», sonreía el periodista.
Muchos le definen hoy como a un demócrata convencido, situado en la izquierda política y siempre un defensor de las libertades y de los valores constitucionales.
En un tuit, Pablo Casado, presidente del Partido Popular, le ha recordado como «un apasionado de la información libre y de la literatura, al que los terroristas de ETA tuvieron en su diana por defender la libertad de todos».
María Jesús Montero, portavoz del Gobierno, también ha recordado al periodista desde la Moncloa en una rueda de prensa: «Su labor, su trabajo periodístico ha sido ejemplo para muchas generaciones de periodistas».  
José María Calleja publicó en diario.es una última columna en la que alababa la solidaridad que estaba creciendo entre los vecinos debido al confinamiento. Ese último texto, del 17 de marzo, se titulaba “Entre resistiré y no tocarse”.

martes, 21 de abril de 2020

La paradoja del periodismo en los tiempos del coronavirus

MADRID.-Golpeados por el huracán económico y social desatado por la COVID-19, los medios de comunicación afrontan una paradoja que proyecta nuevas dudas sobre su futuro y densas sombras sobre un modelo de negocio que numerosos expertos consideran agotado.

Y es que mientras que el desafío sanitario global ha tenido un efecto positivo en las audiencias y en las visitas a las ediciones digitales de todo el mundo, que se han disparado hasta índices históricos, también ha contribuido a ahondar aún más la aguda crisis de 2012 con el cierre de nuevas publicaciones, más recortes de plantillas, reducciones de sueldos e incluso despidos.
Las cifras son elocuentes: según la agencia Comscore, la audiencia de los canales de televisión alcanzó un 73% por ciento en la segunda semana de marzo, durante la explosión de la crisis, y cadenas de noticias como FOX News batieron registros históricos.
En España, y según la agencia Barlovento, la audiencia de los informativos creció un 6.5% en el mes de marzo, ya con el estado de alarma decretado, con un total de 41 millones de consumidores -audiencia acumulada-, cifra que significa un aumento de más de 2,5 millones de espectadores respecto al mes anterior.
La televisión pública BBC anunció a principios de abril que su audiencia aumentó un 24% respecto al año pasado en medio de los aplausos de los expertos, que celebran que su información y programación adaptada a la crisis sanitaria le haya permitido recuperar una reputación socavada en los últimos años por las disputas políticas.
La avidez de información también se reflejó en internet. Según Comscore, las visitas a diarios y otros medios de información digitales en EEUU se multiplicaron un 18% en la segunda semana de marzo, con 638 millones entradas en páginas de noticias, el máximo entonces del año.
El 30% de ese incremento se produjo en las secciones locales, una tendencia que fue similar en Europa y América Latina. Aún así, aun lejos de las imbatibles Google, Facebook, Twitter, Amazón o Yahoo.
“Sí, el público ansía información. Y sí, la información proporcionada por los periodistas es importante. Pero este es un momento incierto para muchos en los medios”, advertía Tom Jones, columnista de la prestigiosa publicación estadounidense especializada en medios de comunicación pointer.org
“Se están acercando tan peligrosamente a ese punto en el que algunos periódicos se preguntan si podrán sobrevivir mucho más tiempo, y eso significaría que no podrían proporcionar ninguna cobertura, gratuita o de otro tipo”, explicaba en un largo artículo.

La publicidad, el talón de Aquiles

Jones apuntaba dos razones en su análisis sobre la evolución y las carencias de la prensa de digitales: primero, la decisión, errónea a su parecer, de eliminar el pago y ofrecer de forma gratuita las informaciones sobre la crisis sanitaria del COVID-19.
En su opinión, la confusión entre la vocación de servicio, la urgencia por ser “el más actualizado” y la necesidad de ofrecer contenidos de calidad, que se diferencien claramente de las “noticias falsas” y otros bulos, han restado a los medios la oportunidad de fidelizar lectores y ganar suscriptores que contribuyan a la viabilidad económica.
La segunda es el desplome de la publicidad, una tendencia que igualmente se ha incrementado a medida que la crisis se ha agudizado y prolongado, ya que más allá de las empresas relacionadas con la higiene, el resto prefieren evitar que sus marcas se asocien a la pandemia, que coloniza la mayor parte de las informaciones.
“El nombre del virus supera a ´Trump´ como la palabra clave bloqueada por la mayoría de las marcas, un problema para los editores de noticias digitales”, aseguraban a principios de abril en el Wall Street Journal los periodistas Patience Haggings y Sahil Patel.
“Con las pérdidas publicitarias masivas relacionadas con el coronavirus, las suscripciones son más importantes que nunca”, insistía Jones.
Igualmente aquí, las cifras son expresivas: en España, por ejemplo, el despegue del consumo de informativos y de televisión llegó acompañado de una caída de los GPRS y de los precios de la mayoría de los mercados, desde las cadenas generales, a los medios digitales y por supuesto de las ediciones impresas.
Si el desplome de las ventas llamadas de “papel” era una tendencia imparable desde la crisis del 2012, en marzo de 2020 rozaba la debacle: los periódicos más vendidos en España -a parte de la prensa deportiva- no llegaban a los 75.000 ejemplares.
Y al igual que hace ocho años, cuando la crisis segó miles de empleos y se creía que había llegado a su cenit, las consecuencias han sido medidas expeditivas o ERTES, que aunque frenan el primer impacto no garantizan el empleo a medio plazo.

Crisis de un modelo agotado

“Despidos, recorte de salarios, postergación y/o suspensión de pagos, es la receta universal de las grandes corporaciones mediáticas frente a la pandemia. Ese ha sido el itinerario en Chile, Argentina y Uruguay”, responde Zuliana Lainez, vicepresidenta Primera de la Federación Internacional de Periodistas (FIP).
“La tragedia es más devastadora para los periodistas regionales en Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Centroamérica, donde como trabajadores autónomos tienen como única vía de supervivencia la publicidad”, agrega Lainez sobre la situación en América Latina, que se repite con características paralelas en Australia y Europa.
En algunos lugares, la necesidad de sobrevivir ha llevado a soluciones de urgencia como la de reducir la impresión: el Tampa Bay Times, cuyos lectores son en su mayoría personas de edad, ha optado por salir al kiosko solo miércoles y domingos.
Pocos han apostado, sin embargo, por proseguir con los planes originales: en Estados Unidos, el New York Times (NYT) ha decidido mantener la estrategia de “muros de pago” y en España, ediario.es ha optado por reducir los sueldos de forma progresiva para tratar de mantener su modelo.
“Queremos repartir los esfuerzos de la manera más equitativa posible y evitar los despidos mientras tengamos otra opción. No queremos recurrir tampoco a un ERTE, como están haciendo otras empresas, porque nuestro trabajo es hoy más necesario que nunca”, explica su director, Ignacio Escolar.
“Necesitamos a todo nuestro equipo para poder mantener nuestro periodismo. A pesar de todo. Más aún en estos momentos, en los que la información es un bien de primera necesidad”, argumenta en una idea similar a otros medios nuevos, como la revista Alternativa Económicas, que tienen muy presente la lección de 2012 sobre el peligroso vínculo entre los medios de comunicación y las grandes corporaciones empresariales.
Muchos expertos convergen en esta idea: la inviabilidad de un periodismo que se mezcla con la política y que depende de fondos de inversión o grandes corporaciones enpresariales, como PRISA en España, Telemundo en México o Gannett y Media News Group en Estados Unidos.
“Es un momento de profunda crisis para el negocio local de noticias, que podría haber sido arrastrado primero por una ligera brisa y ahora se enfrenta a un huracán”, argumentaba en su última columna en el NYT el influyente Ben Smith.
“Pero también es un momento de gran promesa para una nueva generación de publicaciones locales en gran parte sin fines de lucro” en una fórmula que, combinada con la financiación pública, Smith defiende como la mejor solución para salvar lo único valioso que en su opinión queda en el periodismo actual “los periodistas”.

Nuevo modelos, viejo periodismo

Smith respalda proyectos como American Journalism Project, impulsado por Elizabeth Green y John Thornton, que trata de revitalizar los pequeños medios locales a través de una modelo financiero sostenible que implique a la sociedad civil, y se beneficie de las donaciones personales y la inversión pública.
“No sé si es una paradoja perfecta, pero sí una gran paradoja”, explica Alfonso Armada, presidente en España de Reporteros Sin Fronteras (RSF). “La gente ha descubierto que necesita los medios, pero no está dispuesta a pagar por ellos. Y hay que persuadirle de que la buena información, la que no es bulo, es la de pago”, subraya.
“En esta situación, con el desplome de la publicidad, me temo que muchos medios no van a sobrevivir, que van a ser víctimas colaterales de la COVID-19”, lamenta.
Armada, al igual que otros como el periodista y corresponsal Ramón Lobo, creen que esta es la misma crisis que en 2012, pero aumentada, una crisis sistémica que, más allá del debate sobre las plataformas, la publicidad o el modelo de negocio, es “de reputación”.
Una crisis de valores con un origen claro: el periodismo ha perdido sus señas de identidad y no solo no responde a las necesidades de los lectores, sino que parece alineado con el poder, sentado en silencio al lado de los que causaron la debacle en 2012 en vez de exigirle responsabilidades.
“¿Por qué el NYT demostró que era una especie de baluarte contra los abusos de poder de Trump y su patulea?”, se pregunta Armada. “Dando información crítica y bien elaborada. Y eso persuadió a muchos lectores en el mundo de que había que apoyar al periódico subscribiéndose y pagando por la información”, argumenta.
“Si quieres buena información, si quieres una democracia digna de tal nombre, hace falta información soluble, información potable e información crítica que sea contrapoder”, insiste Armada, para quien el bálsamo de Fierabrás es mezclar los valores del periodismo y las ventajas de la tecnología actual.
“Separarse más del poder, volver a las esencias del periodismo, y confiar que eso sea rentable”, concluye. “Igual la ecuación no funciona, pero en algunos países (grandes medios) han demostrado que el buen periodismo tiene recompensa”, concluye.

lunes, 13 de abril de 2020

Argelia bloquea dos medios digitales críticos con el régimen: 'Maghreb Emergent’ y ‘Radio M’

RABAT.- Los sitios digitales argelinos Maghreb Emergent y Radio M, pertenecientes a la misma empresa, han sido bloqueados desde el pasado jueves, según ha denunciado este sábado el editor de ambos medios a través de un comunicado. La noticia se produce dos semanas después de que el periodista independiente Khaled Drareni, de 40 años, fuese encarcelado el 27 de marzo, acusado de atentar contra la integridad nacional. El periodista Drareni, colaborador de Radio-M, solía informar de forma muy detallada sobre las protestas en Argel, según publica El País de Madrid.

Tanto Maghreb Emergent, especializado en economía, como Radio M, eran dos de las principales referencias entre los activistas del llamado Hirak (movimiento, en árabe). El Hirak nació el 22 de febrero de 2019 cuando de forma inédita, cientos de miles de ciudadanos se echaron a las calles para protestar contra la candidatura del entonces presidente, Abdelaziz Buteflika, a un quinto mandato.
Desde entonces, miles de estudiantes se manifestaban todos los martes y decenas de miles de ciudadanos salían a las calles cada viernes. Reclamaban la independencia de la sociedad civil respecto al poder militar y la regeneración democrática del país. Lo hicieron durante 56 viernes consecutivos hasta que el 20 de marzo, las distintas organizaciones que formar el Hirak decidieron iniciar una “tregua sanitaria” y suspendieron las marchas a causa de la pandemia.
El director de Radio M y Maghreb Emergent, Ihsane El Kadi, indicó por teléfono desde Argel que la razón del bloqueo es “simplemente política”. “Vivimos aún en la era Buteflika. Nada ha cambiado. Es como si él se hubiera presentado a un quinto mandato”. En cuanto al futuro de ambos medios, El Kadi sostiene que van a continuar trabajando con todos los periodistas: “Tenemos mucha gente que nos sigue desde fuera de Argelia. Y también dentro de Argelia pueden seguirnos utilizando una VPN. Así que yo calculo que vamos a seguir contando al menos con la mitad de la audiencia que tenemos ahora”.
En Maghreb Emergent y Radio M trabajan más de una veintena de profesionales, algunos de los cuales son también copropietarios de estos medios, según señala el comunicado.
El pasado 5 de abril Ihsane El Kadi publicó un artículo de opinión sobre los primeros 100 días de gobierno del presidente Abdelmayid Tebún, a quien describió como un “un personaje sin consistencia” que tendrá que hacer frente a la pandemia y a la caída de los precios del petróleo, “la peor situación del país” desde la guerra civil desatada en 1992. “El sistema, constituido más que nunca alrededor del Ejército Nacional Popular, ha elegido a un hombre fachada por sus cualidades de maleabilidad y su ausencia de carisma político”.
La Liga Argelina por la Defensa de Derechos del Hombre emitió un comunicado en el que denuncia “la deriva autoritaria”, “la censura, el acoso a los periodistas” y hace un llamamiento al Gobierno "para que detenga esta campaña, que no hace más que exacerbar el clima de desconfianza y exasperación en estos tiempos de pandemia donde son necesarios la serenidad y la solidaridad nacional”.
El sitio digital argelino TSA, el de mayor difusión del país, también sufrió un bloqueo semejante en 2017, y volvió a sufrirlo desde el 12 de junio de 2019. Tras casi diez meses sin que los argelinos tuvieran acceso a TSA, sus responsables aseguran que desde hace una semana el bloqueo ha sido parcialmente levantado.

sábado, 11 de abril de 2020

Fallece en Madrid el periodista José Martínez de Velasco


MADRID.- El periodista José Martínez de Velasco, que desarrolló su carrera profesional en la Agencia Efe, donde fue responsable de la información religiosa y se ocupó también de la cobertura política en el Congreso de los Diputados, ha fallecido en Madrid a los 68 años.

Tras cursar Periodismo, formación que amplió con estudios complementarios en Psicología, Historia de Evolución de las Ideas Políticas y Fundamentos y Teoría del Derecho, De Velasco (Madrid, 1952) se incorporó en 1977 a la Agencia Efe, en la que llegó a ser redactor jefe del departamento de Nacional.
En 1982 abrió la oficina de Efe en Zaragoza con motivo del Mundial de Fútbol y fue delegado de la agencia en Aragón. A finales de la década de los ochenta regresó a Madrid y hasta noviembre de 1991 estuvo al frente y cubrió información parlamentaria en el Congreso de los Diputados.
A continuación desempeñó iguales responsabilidades en las secciones de Local, Cultura y Sociedad. Desde octubre de 1996 y hasta marzo de 2010 se encargó de la información religiosa. En agosto de 2011 intervino en la cobertura del viaje a Madrid del papa Benedicto XVI para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
Martínez de Velasco fundó y presidió la Asociación de Periodistas de Información Religiosa (APIR) y fue miembro del consejo editorial del periódico Religiondigital.com. Además participó como ponente en foros y congresos sobre diálogo interreligioso y de relaciones de los medios de comunicación con las confesiones religiosas.
En mayo de 2008 creó su propio blog en Internet, 'El Trastevere', con información religiosa, que mantuvo hasta 2015 en el portal de la revista cristiana '21'.
Es autor de los libros 'Los Legionarios de Cristo. El nuevo ejército del Papa' (2002), en el que analiza la evolución del movimiento ultracatólico desde que fue fundado en México en la década de los cuarenta, así como sus vínculos con el poder político y financiero.
También de 'Los documentos secretos de los Legionarios de Cristo' (2004), en el que desvela casos de pederastia en los seminarios que esta congregación realiza en España, así como los secretos de ésta, su relación con el poder político y económico en España, y su movimiento de laicos, el Regnum Christi. En 2010 prologó el libro 'Lobos con piel de pastor. Pederastia y crisis en la Iglesia católica', de Juan Ignacio Cortés.

jueves, 9 de abril de 2020

Periodismo de Misterio / Guillermo Herrera *

Este canal siempre se ha definido como “periodismo alternativo de misterio” porque llevo toda la vida trabajando en este género, que algunos piensan que es de locos y de ‘flipados’, como los que salen en las películas apocalípticas con los pelos de punta y los ojos de fanático para ridiculizarlos. 
Fundé y dirigí el primer periódico esotérico de España en el año 88 llamado “Universo Secreto”, que era mensual y se vendía en casi todos los quioscos de España por un módico precio, y desde entonces no he parado de difundir estos temas en las redes, por lo que soy un veterano en este tipo de trabajo.

El género de periodismo alternativo de misterio no se basa en supuestas certezas absolutas como las religiones, sino en probabilidades sobre lo que puede estar ocurriendo entre las bambalinas del poder, basado en filtraciones de inteligencia, rumores, predicciones, especulaciones y coincidencias con las noticias oficiales. Por eso lo llamo “artículo de opinión”, porque opinar es libre, un derecho universal reconocido en todo el mundo, menos en los regímenes totalitarios.

DEFINICIÓN

El conocido como Periodismo de Misterio es una rama especializada que trata temas relacionados con lo insólito. Es una rama informativa más que, a pesar de ser considerada por muchos como un ámbito estrafalario propio de ‘cazafantasmas’, tiene un reconocimiento académico en la Universidad, y también cuenta con una gran audiencia, porque el público desea conocer aquellos casos y noticias donde lo imposible cobra forma. La literatura de misterio puede abarcar un misterio de carácter sobrenatural o suspense en el cual la solución no tiene por qué ser lógica.

Un misterio puede ser un negocio muy reservado, pero también puede ser una cosa arcana o muy recóndita, que no se puede comprender, explicar o descubrir. Se trata de algo reservado, secreto o recóndito. Las personas tienen tendencia a interesarse en los misterios como algo inaccesible ya que, en caso de ser revelado, perdería su atractivo. Lo insólito es aquello que es raro, extraño y desacostumbrado.

FAKE NEWS

Por esta razón es muy fácil acusar a este género periodístico de “fake news”, cuando no se trata de noticias propiamente dichas, sino de especulaciones y opiniones personales procedentes de distintas fuentes, que se suponen solventes. Se trata pues, de una información puntera de vanguardia que trata de adelantarse a los acontecimientos y trata de averiguar qué se esconde y oculta detrás de las noticias oficiales.

El primer interesado en luchar contra las supuestas “fake news” es el poder político y financiero que controla los medios de comunicación, y que es el primer generador de noticias falsas, con el fin de censurar y acallar todas las voces disidentes que discrepen de la narrativa oficial, para erigirse ellos en los únicos portadores de la supuesta ‘verdad’ absoluta. Tratan de imponer un pensamiento único, como si fuera obligatorio que todos pensáramos lo mismo.

Es muy fácil acusarme de ‘falsario’ cuando no puedo demostrar ni confirmar las filtraciones de la información de inteligencia hasta que se haga público lo anunciado, ni puedo demostrar las predicciones hasta que acierten o fallen. Lo único que puedo mostrar es el enlace a la información.

Unas veces se acierta y otras veces se aprende, pero la mayor parte de las veces suele dar en el clavo. Cuando se acierta, todo el mundo se calla, y lo ve como algo normal, pero cuando falla una predicción, algunos lectores te lo echan en cara como si uno tuviera la obligación de ser un adivino y tener una bola de cristal, o una baraja de tarot para adivinar el futuro.

Por eso siempre he dicho que este género periodístico es tan difícil como caminar por el filo de una navaja, o como acertar en la manzana de Guillermo Tell. Yo no engaño a nadie, pero a mi me pueden engañar mucha veces, a pesar mi cautela para evitarlo, porque los malos suelen filtrar noticias falsas para desacreditar a los informadores alternativos, e incluso los buenos lanzan “fake news” para despistar al enemigo. Es decir, que nos utilizan a los periodistas como carne de cañón.

CONSPIRACIONES

Otros nos llaman ‘conspiranoicos’ o seguidores de “teorías de conspiración” con el fin de ridiculizarnos y hacer que la gente siga creyendo en los noticiarios oficiales manipulados por el poder de turno. Los escépticos no se dan cuenta de que hacen el juego a los manipuladores.

El término “teoría de la conspiración” se usa para referirse a ciertas teorías alternativas a las oficiales que explican un acontecimiento, o una cadena de acontecimientos, por medio de la acción secreta de grupos poderosos, extensos y de larga duración, y además en tono peyorativo para descalificar esas teorías. La hipótesis general de una teoría de conspiración es que ciertos sucesos importantes en la historia de la humanidad han sido ocasionados por conspiraciones ocultas y misteriosas.

Al final siempre resulta incómodo para el poder este género periodístico, porque no se traga la versión oficial e insta a cuestionarse todo lo que nos dicen por la caja tonta, es decir, invita a la duda y a la reflexión, a que cada persona recupere su derecho soberano a pensar por sí misma, lo cual siempre es muy peligroso para el poder de turno que quiere prohibir el pensamiento disidente.

Prohibido pensar por orden de la autoridad gubernativa.” No lo dicen así directamente porque sería ridículo, pero lo insinúan constantemente con amenazas y sanciones a los periodistas, mientras que la gente calla y achanta.

Cada informador alternativo tiene su estilo propio y cada uno juega su papel en el despertar de la humanidad mediante la divulgación de temas diferentes, o mediante la exposición de puntos de vista distintos que nos enriquecen a todos. No podemos ser todos exactamente iguales, porque la diversidad forma parte de la vida para que podamos aprender distintas lecciones. Aprecio a todos, porque todos tienen algo que enseñarme. Quiero a todos y no desprecio a nadie, porque cada uno tiene su mérito, y defectos los tenemos todos. Dios nos creó diversos para enriquecer a la humanidad.

Soy un hombre de paz y me llevo bien con todo el mundo, incluso con los que discrepan, excepto con aquellos que carecen de cortesía y me llaman ‘mentiroso’ y otras lindezas, aunque trato de ignorarlos en la medida de lo posible y de no entrar en su juego agresivo. Pero el hecho de que yo sea un tigre manso no significa que no tenga garras para defenderme cuando me atacan, porque eso de poner la otra mejilla no va con un guerrero de la luz.

CALUMNIAS

León Valverde dice que yo me ‘prostituyo’ por vivir de mi profesión, y es lógico que lo diga porque él no es periodista, ni tiene la habilidad de resumir su información como solemos tener todos los profesionales. Los invito a predicar con el ejemplo a todos los que opinen eso. Intenten vivir del aire como los yoguis del Himalaya, trabajando gratis en su oficio ocho horas todos los días, a ver qué les parece ese estilo de vida indigente.

Un profesional del periodismo es una persona que ejerce su profesión y vive de ella como todo el mundo. Es una persona que recibe un pago por ejecutar tareas especializadas, y completarlas a cambio de una cuota. Es una persona cuyo propósito de vida se concreta a través de la práctica de una actividad laboral específica.

Yo trabajo con dignidad, independencia y sentido crítico, y por eso me han desmonetizado tantos vídeos. Hay que “estar en el mundo pero sin ser del mundo” como dice el Evangelio. Es como el arte de nadar y guardar la ropa, o el arte de caminar por el filo de una navaja. Es el arte de aprovechar los resquicios del sistema para sobrevivir, sin dejarse contaminar. Estoy acostumbrado a ello, porque toda la vida he trabajado con jefes con los que no estaba de acuerdo.

Otros dicen que les molestan los anuncios de mis vídeos. A mi también me molestan mucho los anuncios cuando veo una peli en la tele, pero gracias a ellos puedo verla gratis. Todo oficio tiene sus ventajas y sus inconvenientes, y seguro que todo el mundo tiene que tragar cosas que no le gustan en su trabajo para poder comer todos los días.


 (*) Periodista español

martes, 7 de abril de 2020

Moncloa activará 100 millones de euros en publicidad institucional para los medios

MADRID.- El Gobierno ultima los detalles de su Plan de Publicidad y Comunicación Institucional 2020, paralizado por la investidura de Pedro Sánchez y luego por la crisis del coronavirus. Las fuentes consultadas por Invertia indican que el objetivo es poder anunciarlo tras el Consejo de Ministros de este martes, aunque podría retrasarse algunos días más, a juicio de El Español.

La idea de Moncloa es poder dotar de 100 millones de euros al nuevo plan, un dinero destinado a financiar las campañas institucionales de publicidad de los principales ministerios. En este plan encontramos la Campaña de la Renta, las de Tráfico o de empresas públicas como Adif o Enaire.
Sobre la mesa también vuelven a estar las desgravaciones fiscales de entre el 25% y el 30% para anunciantes en medios de comunicación, mientras dura el estado de alarma, en la línea de lo aprobado por Italia el mes pasado.
La puesta en marcha de este plan y de las desgravaciones son dos de las demandas de los principales medios de comunicación que pedían el incentivo a la publicidad privada y la liberación de estos recursos públicos para paliar los devastadores efectos que está teniendo la crisis económica generada por el coronavirus en la publicidad de radio, prensa, televisión e internet.
La semana pasada Moncloa aprobó una ayuda de 15 millones de euros para que las televisiones privadas aumentasen la cobertura de sus señales. De momento, el único incentivo para medios de comunicación adjudicado en medio de las críticas de todos los sectores. El Gobierno justificó estas ayudas por el carácter industrial de la inversión de las televisiones y sus problemas de ingresos publicitarios.

Caída de la publicidad

Sin embargo, dependiendo del soporte, los desplomen afectan a todos y van del 80% en la radio, pasando por el 70% al 50% en prensa y el 45% en televisión. Los medios han pedido además que se suspenda el pago de cuotas a la seguridad social o que se exima del pago de la tasa RTVE en el caso de las televisiones.
En cuanto a las ayudas, el plan de publicidad y las desgravaciones al sector, son dos medidas que no requieren gran inversión del Estado y que ayudan a todos los medios y agencias por igual. De hecho, el plan institucional de comunicación era una de las asignaturas pendientes del Gobierno en este año, ya que habitualmente se publica en febrero.
En este caso, las fuentes consultadas indican que el montante que se maneja es de 100 millones, lo que sería superior en 37 millones a los 62,8 millones de 2019, un crecimiento del 58% respecto a la partida adjudicada el año pasado, uno de los presupuestos más austeros desde el año 2015.
Por el contrario, si se concreta la cifra de 100 millones, estaríamos ante la cifra más elevada destinada a la comunicación institucional desde los 130 millones aprobados en 2010, los últimos presupuestos de José Luis Rodríguez Zapatero.

Plan de publicidad 2019

En el sector se indica que estamos ante un año excepcional y que el la cifra está en la línea de lo solicitado por los medios. El plan es anual, por lo que estos 100 millones se pueden distribuir con campañas durante todo el año. Sin embargo, Moncloa quiere articular fórmulas para que los recursos lleguen cuanto antes a los medios.
En el Plan de Publicidad y Comunicación 2019, la mayor campaña fue la de la DGT y la concienciación de los accidentes en carretera, por valor de 13,9 millones de euros; la sensibilización del pago de impuestos (Renta), por valor de nueve millones de euros; la campaña contra la violencia de género con 6,5 millones; y la ciberseguridad (Incibe) con tres millones de euros.
El 65,8% de las campañas insertaron anuncios en internet durante el año 2019, el 45,3% utilizó prensa (incluyendo dominicales y suplementos) como soporte publicitario, radio el 37,6%, televisión con el 36,8%, soportes exteriores con el 18,8% y cine con el 7,7%.

Quieren jorobarnos a los periodistas / Guillermo Herrera *

El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, planteó el pasado viernes la necesidad de hacer una revisión de los instrumentos legales con los que se cuenta para impedir los bulos "o al menos para no se vayan de rositas los que contaminan la opinión pública de manera grosera y sin justificación ninguna".
 
En rueda de prensa en La Moncloa, junto al titular del Interior, Fernando Grande Marlaska, Campo ha reconocido la existencia de un problema social con la irrupción de las "fake news" y ha recordado que los ciudadanos tienen el derecho constitucional a recibir información veraz.

Se ha comprometido en este contexto a revisar si los instrumentos existentes ahora son "suficientemente fuertes" para salvaguardar ese derecho, y ha considerado que en un estado de alarma, en el que las noticias falsas pueden hacer mucho daño, está "más que justificado" hacer esa revisión, a su juicio, "con la calma y la serenidad necesaria" que exige cualquier cambio legislativo. Está claro que quieren meternos mano a los periodistas.


¿Quién decide lo que es o no veraz? ¿El “Ministerio de la Verdad” de Orwell en su novela ‘1984’? ¿O lo decide cada lector independientemente pensando por su propia cuenta? ¿A quién pueden hacer daño las noticias que no les gustan, a los ciudadanos o a los políticos?

De esto se deduce que será más fácil dar opiniones que noticias, porque a ver si son capaces de perseguir a alguien por opinar de una u otra manera. Pero aquí está la pregunta clave ¿qué pasa si uno opina que la información que está dando es la correcta?

A mi juicio, lo que quieren cargarse es el género de periodismo alternativo de misterio, donde es imposible trabajar con certidumbres absolutas, sino más bien con incógnitas sobre lo que está pasando o puede pasar entre bambalinas. Pero las preguntas son siempre muy incómodas para el poder, porque a los políticos no les gusta que pensemos por nosotros mismos.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Según George Orwell la libertad de expresión consiste en decirle a la gente lo que no quiere oír, porque es más fácil engañar a la gente que convencerla de que ha sido engañada según Mark Twain.

Según el diccionario de la Real Academia de la Lengua la libertad de expresión es la facultad de emitir o recibir información por cualquier medio de difusión, sin censura previa gubernativa, y la libertad de pensamiento es el derecho de toda persona a tener y manifestar cualquier ideología, y a no ser obligada a declarar sobre ella.

Lo tiene crudo el ministro de Justicia a menos que pueda cambiar la Constitución Española o retorcerla. El artículo 20 de la Constitución Española es muy claro ya que reconoce y protege el derecho a expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones mediante la palabra, el escrito o cualquier otro medio de reproducción, y además el ejercicio de estos derechos no se puede restringir mediante ningún tipo de censura.

Estas libertades tienen su límite lógico en el derecho al honor, a la intimidad, a la propia imagen y a la protección de la juventud y de la infancia. Sólo se podrá acordar el secuestro de publicaciones, grabaciones y otros medios de información en virtud de una resolución judicial.

La libertad de expresión es un principio que apoya la libertad de un individuo o de una comunidad de articular sus opiniones e ideas sin temor a represalias, censura o sanción posterior.

El artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos establece que todos tendrán derecho a opinar sin interferencia y todos tendrán derecho a la libertad de expresión. Este derecho incluirá la libertad de buscar, recibir y difundir información e ideas de todo tipo a través de cualquier medio de comunicación, independientemente de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o impreso, en forma de arte, o por cualquier otro medio de su elección.

Según la "lista enemiga de Internet" de Reporteros sin Fronteras, los siguientes estados participan en una censura generalizada en Internet: China, Cuba, Irán, Myanmar/Birmania, Corea del Norte, Arabia Saudita, Siria, Turkmenistán, Uzbekistán y Vietnam. En una lista de cincuenta países, España ocupa el lugar 44 con menor libertad de expresión.

RETROCESO

El pasado día 20 de enero la Plataforma en Defensa de la Libertad de Información pidió al nuevo Gobierno de coalición reformas legislativas en defensa de las libertades tras el retroceso sufrido en los últimos años.

"En España se ha condenado a penas de cárcel por un chiste o una canción. También se ha multado y detenido a periodistas cuando estaban informando. O se ha pedido prisión para medios que han publicado filtraciones. Y las normas que permiten todo ello siguen vigentes, por lo que puede seguir ocurriendo", denunció la presidenta de la Plataforma, Virginia Pérez Alonso. En ese sentido, la Plataforma cree que la legislación española debe ajustarse a los estándares internacionales sobre libertad de expresión e información.


En España, la libertad de expresión ha sufrido un grave retroceso desde 2015, cuando el Partido Popular impuso su mayoría absoluta para aprobar en solitario la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana (conocida como “Ley Mordaza”) y la reforma del Código Penal, que entró en vigor el 1 de julio de ese año.

LEY MORDAZA

La Ley Mordaza amplió la potestad sancionadora de la Administración, y está plagada de imprecisiones legales que favorecen la discrecionalidad policial, provoca autocensura informativa y desmovilización ciudadana.

Amnistía Internacional lo documentó en su informe "España: activistas sociales y el derecho a la información, en el punto de mira", que recogía testimonios sobre identificaciones masivas de manifestantes y sobre acusaciones policiales a periodistas que solo querían hacer su trabajo. Para Amnistía Internacional la Ley Mordaza no respeta los estándares internacionales de derechos humanos y daña las libertades de expresión, información, reunión pacífica y asociación.

En este análisis, la organización concluye que esta ley se está utilizando contra el activismo social y, específicamente, contra activistas que defienden el derecho sagrado a la vivienda, obstaculizando su derecho a expresar sus reivindicaciones de manera pacífica.

MINISTERIO DE LA VERDAD

La búsqueda de Orwell se centra en describir muy analíticamente cómo funcionan y se sostienen los regímenes totalitarios. De ahí la importancia que cobra, aun en la actualidad, el nombre de “Gran Hermano” para el gran dictador de turno. El ministerio de la Paz promueve la guerra, el ministerio de la Verdad miente o el del Amor donde se tortura y asesina.


El Ministerio de la Verdad se dedica a manipular o destruir los documentos históricos de todo tipo (incluyendo fotografías, libros y periódicos), para conseguir que las evidencias del pasado coincidan con la versión oficial de la historia, mantenida por el Estado.

El nombre de Ministerio de la Verdad es un término equivocado, porque en realidad sirve al contrario: es responsable de cualquier falsificación necesaria de los acontecimientos históricos. Además de ser el encargado de administrar la verdad, el ministerio extiende un nuevo lenguaje entre la población llamado neolengua, en el que, por ejemplo, la "verdad" se entiende en el sentido de las declaraciones como 2+2=5, cuando la situación lo requiere por razón de Estado.



(*) Periodista español

miércoles, 1 de abril de 2020

Decenas de periódicos australianos cesarán sus ediciones impresas

SIDNEY.- El grupo australiano de medios News Corp, de Ruper Murdoch, anunció el miércoles que dejará de imprimir alrededor de 60 periódicos regionales, después que el sector recibió un duro golpe ante las previsiones de caída de los anuncios publicitarios en medio de la pandemia de coronavirus.

La empresa apuntó que los periódicos en los estados de Nueva Gales del Sur, Victoria, Queensland y Australia del Sur dejarán de imprimir y pasarán a operar apenas en línea.
"No hemos tomado esta decisión a la ligera", dijo el presidente ejecutivo de News Corp Australasia, Michael Miller. 
"La crisis del coronavirus ha creado presiones económicas sin precedentes y estamos haciendo todo lo posible para preservar tantos empleos como sea posible", añadió.
"La suspensión de nuestras ediciones regionales impresas nos ha sido forzada por la rápida disminución de los ingresos por publicidad a raíz de las restricciones impuestas a las subastas de bienes raíces, el cierre forzado de los lugares de eventos y restaurantes a raíz de la emergencia del coronavirus", agregó.
Muchos grupos de medios australianos ya se habían centrado en el contenido en línea antes de que comenzara la pandemia.
Esta suspensión ocurre luego de una serie de anuncios de cierre de medios, incluido el agencia nacional AAP, que dejará de funcionar a finales de este año.

La FAPE y APM piden a Moncloa que mejore el sistema de preguntas en ruedas de prensa

MADRID.- La Federación de Asociaciones de Periodistas de España y la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) han solicitado este miércoles al Gobierno que mejore su sistema de ruedas de prensa telemáticas y permita cada día a un grupo de cinco o seis periodistas preguntar y repreguntar en directo por videoconferencia.
FAPE y APM han trasladado al secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Oliver, esta fórmula alternativa, que consistiría en combinar las preguntas telemáticas recibidas por el chat con la posibilidad de que cada día un grupo de los periodistas que cubren habitualmente Moncloa añadan preguntas no formuladas o repreguntar.
"No pretendemos enmendar el sistema actual, sino proponer una mejora, de tal manera que, alternando las preguntas seleccionadas y las que los periodistas presentes formulen, queden cubiertas las necesidades básicas de todo ese ingente número de medios que cada día esperan la rueda de prensa", han precisado.
Esta petición se produce después de que periodistas de diversos medios de comunicación hayan suscrito un manifiesto titulado "La libertad de preguntar" en el que reclaman al Gobierno ruedas de prensa libres y sin control previo, sobre todo en un momento como el actual con la crisis del coronavirus.
El texto, suscrito por la mayoría de los comunicadores que cubren la información del Gobierno así como por muchos otros profesionales, rechaza el método que está empleando la Secretaría de Estado de Comunicación, con preguntas que se envían antes o durante las ruedas de prensa pero pasan el filtro del titular de ese departamento, Miguel Ángel Oliver, antes de ser formuladas.
Consideran que el sistema "revela falta de transparencia" e "interés por controlar la información" y supone al fin y al cabo una "nueva forma de censura a los medios".